Mis patos casi emigran

El pasado 8 de julio, mis patos casi emigran…
Me quedé un poquito más en la cama ya que entraba a trabajar a las 9:30 hs. Pero a las 8:00 a.m. uno de mis vecinos llamaba a la puerta. Los patos se habían escapado… habían pasado el alambrado de su corral (y eso que encima tienen el parral!!). La cuestión es que uno estaba en otra zona de mi fondo comiendo yuyitos, pero el otro había dado un salto por encima del cerco con enredadera que nos separa de los vecinos. Éste, queriendo atraparlo, lo asustó y mi pato emprendió vuelo y pasó por sobre mi fondo y siguió de largo y pasó por encima de los locales que están al otro lado de la cuadra.

Volaron por encima de ese alto muro!

Allá fue el hombre a perseguirlos, para que no se fueran a la ruta y lo fue llevando hasta entrarlo al frente de mi casa. Allá cuando salí estaba mi vecino en el portón y más cercano a la puerta de entrada, mi pato. Quisimos atraparlo pero levantó vuelito y se volvió a escapar hasta la calle! Allá quedó en medio de la ruta, cuando apareció un camión y ya me lo imaginaba bajo sus ruedas. El camión y los vehículos que venían detrás aminoraron su marcha, nosotros con el vecino caminando detrás del pato para llevarlo nuevamente hasta casa… ¡Un divertido lío!!

El pato entró al patio pero no entraba por la puerta ni se dejaba agarrar. Tuve que traer el otro pato y atarle una patita a un cordón para que no se escapara también y dejarlo en un pasillo por donde el pato volador por fin entró al ver a su compañero. Luego los atrapamos y mientras yo los sostenía mi vecino le cortaba las alas…. Sabía que debía cortárselas pero la verdad eran tan bonitas con su verde satinado… y nunca imaginé que se elevarían tanto como para pasar por encima de los techos!!!

En este video pueden ver su recorrido, desde la casa del vecino, al otro lado de la enredadera, por encima de los árboles frutales y pasando por encima del muro y techo.

Con las alas cortas, los devolví al corral… Esa tarde estuvieron reacios cuando les llevé comida y agua, aún asustados por el ajetreo de la mañana o tal vez enojados porque les eché a perder su plan de emigración a lugares más cálidos….

Como sea, volando no llegarían muy lejos y seguramente terminarían bajo algún vehículo, así que han vuelto a su corralito seguro, con comida y agua. Si ellos supieran la “suerte” que la mayoría de los patos corren y que en mi casa se salvarán de terminar en la cacerola… dejarían sus ideas locas de escaparse. Ay, patitos, patitos….. qué cosita con ustedes! A ver si se portan bien!

Me dio cierta pena cortarles esas alas hermosas de color verde brillante... en las fotos se ven cortidas si se fijan en ese color....

No se preocupen, ellos son felices aunque no los hayamos dejado volar muy lejos (je!)

Aunque estamos en invierno viven en el agua. Ahora se meten en un pozo con agua y barro y están todos sucios. Aunque les pongo agua limpia (2 veces al día) en una fuente y algún otro recipiente, les encanta el pozo ese con barro y yuyos… así que andan de pecho sucio…

Aquí están picoteando restos de verdura que les puse. ¿No son lindos? A mi me encantan mis patitos!