Nuestra amiga Marita fue a pasear a un lindo vivero el pasado Sábado 29 de agosto.
Allí no solo se deleitó con hermosas plantas florales, enredaderas y pinos, sino que conoció dos perras muy lindas: Violeta y Carmela.


Carmela es la más joven, tiene poco más de 2 años. Es muy vital, corre por todo el campo. De pronto desaparece y se la ve allá a lo lejos, en la carretera ladrándole a los autos. Luego viene y hace fiesta a la gente. Marita se tira al pasto a jugar con ella, es muy juguetona y amigable. Le toma unas fotos.



Violeta ya tiene varios años, es la dominante. Cuando Marita le hacía caricias a Carmela, Violeta vigilaba de lejos muy seria. De pronto se aparecía corriendo en embestida y nuestra dueña se apartaba pensando que atacaría celosa a Carmela, pero ésta última pequeña, se tira al suelo en señal de sumisión y así no pasa mas de unos tarascones, y la vieja Violeta se tranquiliza.

Al rato las dos están sentadas, tranquilas, como buenas amigas.
Marita observa que Violeta camina rengueando. Le pregunta a la dueña si está lastimada y ésta le responde: - No tiene deditos en una pata, solo un muñoncito, por eso me la regalaron.- Marita se compadece y la mira con ternura.
Por otro lado, se da cuenta de la fortuna que tienen estas dos perritas. Viven con quienes les alimentan, tienen total libertad de correr por todas partes, y disfrutan a diario un lugar maravilloso, con césped y árboles.

Y en las tardes soleadas, se echan tranquilas a la sombra a dormir, como se pueden observar a lo lejos en la siguiente foto.
Un saludo a Carmela y Violeta!!