Castración III

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Ver antes: Castración II

LOS DÍAS SIGUIENTES....

Tal vez sea algo molesto el isabelino, pero a Duque no le trajo mayor problema, ni depresion ni nada de lo que leí por ahi.






En tanto el pobre de Bongo tuvo que cambiar sus actividades diarias, ya que de pasar suelto cerca de la casa tuvo que pasar a estar atado en el fondo, ya que Duque recién operado debía estar más cerca nuestro y cuidado. El pobre de Bongo al principio se enojó un poco. Un día le tiré una manzana (que las devora porque le encantan) y cuando a la tarde fui a desatarlo allí estaba la fruta sin una mordida. Eso denotaba su disconformidad por el trato recibido. Otro día dejó el plato con la mitad de la comida (cosa que nunca suele hacer porque es un muerto de hambre el flaco). Pero bueno, de a poco se fue acostumbrando a pasar varias horas atado. Y aqui le vemos jugando con un pedazo de plástico...

Juega solito, se las ingenia para entretenerse..



Sigue jugando y mordisqueando...

Se aburrió!

Duque se sentaba al otro lado del cerco, con su isabelino sin comprender porqué no podía ir al fondo (que le gusta más que a Bongo).

Con su pantalla igual recibía mimos, jugaba....

...¡y ni problema para echarse una siesta!.

*Continúa *